Para Cultivar la Sabiduría del Corazón – Semana 11
CULTIVA UN HÁBITO Y COSECHARÁS UN DESTINO
Los hábitos construyen cauces a través de los cuales la energía, la corriente de la vida, fluye de una manera particular, en correspondencia con nuestra manera de ser. Aunque no nos lo propongamos, y de hecho pueda ser indeseable, esta corriente por el cauce de los hábitos, nos conducirá a un destino.
Solemos decir: esto me gusta, esto no lo quiero, le pido a la vida… afirmaciones que son reflejo de una educación y de una cultura que vive para la autosatisfacción, enfocada en el deseo; la consecuencia de este modo de vivir es el apego y la aversión, que aunque parecen contrarios, son las dos caras de la misma moneda; poco a poco la sana alegría propia de la inocencia es reemplazada por satisfacciones efímeras.
Las simientes del deseo, apego o aversión, echan raíces profundas en la mente, en el cuerpo, en las relaciones, en las motivaciones. En la esfera emocional esta es la causa del miedo -de llegar a lo indeseable o de perder lo deseado-. En la esfera de la mente es el origen de los prejuicios, verdades que justifican tanto las aversiones como los apegos; así han llegado a validarse la crueldad, el separatismo, el egoísmo. Todo lo que nos mueve desde las emociones y las actitudes y estrategias de la mente que las justifican, se manifiesta en nuestro cuerpo; así el cuerpo físico llega a convertirse en el objeto para experimentar el limitado alcance de nuestros deseos, el placer, la comodidad, la ambición.
La personalidad, constituida por nuestro cuerpo físico, nuestras emociones y nuestra mente, es el templo donde se oficia el amor de la vida en cada ser, donde aprendemos a ser Humanos. Cuerpo, emociones, mente, son el medio, no un fin en sí mismos.
El cuerpo físico es un instrumento privilegiado que cuenta con cinco sentidos y un cerebro capaz de darse cuenta conscientemente de lo que sucede adentro y afuera, que nos permite la experiencia de la acción, de la transformación de la creación adentro y afuera y nos permite vivenciar hasta la médula de los huesos el gozo o la esclavitud.
Conforme sea la rectitud de nuestros hábitos será nuestra salud.
Las emociones son como un pentagrama en el que vibra lo que nos conmueve; la naturaleza, la cualidad de esta vibración, es lo que nos vincula a los otros; el estado completo, perfecto, de la capacidad de conmovernos es el amor que puede llegar a la compasión, la ternura; si el deseo es lo que domina la existencia, permanece en su estado ignorante, de miedo, odio, dependencia, ambición.
Conforme sean nuestras emociones, serán nuestras relaciones.
A través de la mente, el pensar, experimentamos lo verdadero, la sabiduría, lo que está más allá de las verdades, más allá de lo conocido y el conocimiento; el orgullo, los prejuicios, el dogmatismo, reflejan la limitación para llegar a la comprensión profunda de la unidad en la diversidad.
Conforme sea la naturaleza de la mente, será nuestra sabiduría.
MEDITACIÓN PARA LA SEMANA 11 (15 minutos):
El gozo y la alegría abren sin ruido las puertas de la sabiduría y de la bondad.
El destino es seguro; la cuestión es: ¿llegaremos a nuestro destino con alegría o no?
Durante 5 minutos:
Con los ojos cerrados en una posición cómoda, adopta el estado de gozo; imagina que el corazón es el que respira, que lo que inhalas y exhalas es gozo y alegría. Sonríe de Corazón.
Durante 5 minutos:
Respira imaginando que en estado de gozo, creas una atmósfera que emana de tu corazón, que te abriga y a la vez abriga todo lo que piensas, lo que sientes y sucede en ti; todo, aún lo difícil, se dulcifica y se aligera revestido de la alegría de tu corazón, que no tiene otro motivo que la vida misma. La Alegría es Gratuita.
Durante 5 minutos:
Imagina que te mueves dentro de esa atmósfera, que reconoces y recibes alegría de todo lo que te circunda, que emites y ofreces alegría a todo lo que te rodea. La Alegría es Contagiosa.
Graciela Solar
Que hermosa reflexión .La meditación la empecé a hacer muchas gracias por compartir
TIERRANATIVA
Hola Graciela
Cómo vas con la meditación? Cuéntanos tus avances, tus experiencias. La clave de todo entrenamiento es la perseverancia ¡ánimo!